Imagen intervenida del original en AquaVioleta
Por Maumy G. (*)
Perdiste, dice el ciego. Debes morir, Charlotte.
Ella, que parece de cera, aprieta los labios. Piensa que no vale la pena quejarse. No tiene sentido. Un pacto es un pacto y debe cumplir. A lo lejos viene el tren. Lo escucha zumbando como en un sueño. Sería hermoso dormir, seguir soñando. Pero no puede.
El ciego la empuja hacia las vías y ella obedece. Se mantiene derecha sobre los rieles. Sonríe. El tren se acerca. Charlotte no tiene miedo. Tampoco lucidez. Ahí donde debe estar su sentido de supervivencia sólo quedan aullidos de viento.
(*) La primera versión de este relato breve fue publicada originalmente en AquaVioleta, bajo el título "Al mejor postor". Lo corregí. Este es el resultado. Te invito a votarlo en Falsaria.